Mi estancia en Aras Rural fue simplemente increíble. Además, había una amplia oferta de actividades interesantes para disfrutar en el lugar. No puedo dejar de mencionar la deliciosa comida sencilla pero excepcional que probé en el restaurante, especialmente la cena del domingo por la noche.

Las cabañas tienen todo lo necesario para descansar, con camas cómodas y duchas calientes. permiten mascotas por un costo adicional. El restaurante ofrece comida deliciosa a precios razonables y el servicio es excelente. La ubicación del alojamiento es perfecta y el personal es atento. Recomendable.

Lo mejor de nuestra estancia fue la limpieza impecable de la habitación y la facilidad con la que pudimos hacer la reserva. Además, nos encantó el encanto de la habitación, toda de madera. La ubicación también fue clave, ya que estaba cerca del pueblo y pudimos ir caminando en pocos minutos. Otra ventaja que disfrutamos fue la amabilidad del personal, quienes nos proporcionaron una almohada extra y nos dieron un secador de pelo cuando lo pedimos.

En cuanto a los aspectos negativos, no nos gustó que la habitación de matrimonio en realidad eran dos camas juntas. Además, nos cobraron 10 € por la niña sin entregarnos ningún recibo.

En la estancia en Aras De Los Olmos me gustó todo. El hotel es bonito, bien cuidado.El restaurante es espacioso, luminoso, comida buena.Servicio de cafetería muy bien.Entorno del hotel excelente.

Pasamos una estancia estupenda en Aras Rural, en Aras De Los Olmos. Nos alojamos en los bungalows y nos sentimos muy cómodos. Disfrutamos de la tranquilidad y pudimos hacer senderismo por la zona. Tamara nos brindó una excelente atención y nos resolvió todas nuestras dudas. Recomendaría este lugar para una escapada de relax. En general, fue una experiencia positiva y volvería a hospedarme aquí.

Me encantó mi estancia en este alojamiento rural durante la Navidad. Me gustó mucho el ambiente tranquilo y relajado, perfecto para desconectar. La habitación era acogedora y confortable, con detalles de madera que le daban un toque especial. Además, disponía de WiFi y TV, lo cual fue muy conveniente. Otra ventaja fue la ubicación, ya que estaba en un pueblo pequeño y tranquilo, rodeado de naturaleza. había un amplio parking disponible para los huéspedes.

En cuanto a los aspectos negativos, hubo algunos detalles que no me gustaron. La persona de recepción fue un poco antipática y puso pegas para cerrar las contraventanas por la noche, lo cual fue un inconveniente.

Nos hospedamos en una de las cabañas, todo muy acogedor tanto las habitaciones como el comedor- cocina con todo el menaje. La calefacción preparada para cuando llegamos. Vistas espectaculares del cielo por la noche desde la terraza. Personal atento y amable. Recomendado para una escapada romántica y/o en familia.

Me sentí como si fuera mi propia casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Durante mi estancia en él, tuve un inconveniente con la entrada a la cabaña. Esta era muy irregular y difícil de subir con las maletas, lo que resultaba incómodo. Además, no había mosquiteras en las ventanas, lo que permitía que ingresaran bichos con el calor. Otro problema fue que los interruptores de los fuegos de la cocina no estaban marcados, por lo que no sabíamos si estaban encendidos o apagados.

A pesar de estos inconvenientes, la atención del personal de recepción fue excepcional. Cuando solicitamos ventiladores, nos los trajeron de inmediato.

El alojamiento en las cabañas es tranquilo y cómodo, con camas y cocina bien equipadas. Las mascotas son bienvenidas con un pequeño suplemento. El restaurante ofrece deliciosos platos a precios razonables. El personal es atento y servicial. Las vistas desde la habitación son impresionantes.

Nuestro fin de semana en Aras Rural fue perfecto. La habitación era acogedora y el trato del personal fue amable y encantador. Nos encantó la ubicación del hotel y disfrutar de la naturaleza en los alrededores. El desayuno fue correcto y el café exquisito. A pesar de que el restaurante estaba cerrado, entendemos la situación actual y nos ofrecieron bebidas de uso personal. Sin duda, recomendamos este hotel.

La única pega fue no poder disfrutar del restaurante en el hotel, pero comprendemos que es ajeno a la voluntad de los propietarios. los colchones podrían mejorar, pero para una estancia breve son aceptables.

Pasamos unos días muy agradables en este encantador alojamiento rural. Nos atendieron muy bien, incluso nos permitieron cambiar la reserva sin problemas. La habitación era acogedora y la limpieza impecable. Además, disfrutamos de un delicioso desayuno continental con café y tostadas. Nos encantó el entorno natural y las cabañas de madera, que le daban un toque especial al lugar.